Cada vez son más usuarios los que necesitan reparar lavavajillas en Madrid, Barcelona o cualquier otra ciudad. Este electrodoméstico ha sido uno de los últimos en entrar en las casas, pero poco a poco se va haciendo indispensable. Sin embargo, es preciso conocer algunos trucos o consejos para un correcto mantenimiento que reduzca los problemas o averías al mínimo, a la vez que alarga notablemente su vida útil.
Uno de los aspectos que menos se suelen vigilar en la utilización de los lavavajillas es el nivel de la sal y del abrillantador, fundamentales para su buen uso y correcta conservación. De hecho, muchos fabricantes desaconsejarán su uso sin la presencia de estos dos elementos.
Si no se quiere tener que llevar a reparar el lavavajillas en Madrid o en otra ciudad de forma periódica, habrá que colocar todos los platos, vasos y demás materiales correctamente en su interior, atendiendo siempre a las indicaciones que se encontrarán en el manual del usuario.
En este sentido, es importante que se preste la atención necesaria a la cristalería, ya que una mala colocación puede ser motivo de ralladuras o incluso roturas durante el programa de lavado.
Además, los utensilios largos nunca han de ser colocados de forma vertical, ya que podrían contactar con los aspersores, corriendo el riesgo de un mal lavado o, en casos peores, de una avería en estas importantes piezas.
¿Qué hacer con los complementos de plástico que a veces se utilizan en la cocina? Es conveniente que todos los utensilios que estén hechos con este material se coloquen en la zona superior del lavavajillas, lo más alejados de la resistencia (por el calor que emite en el secado). Por contra, las cacerolas o cazuelas deberán ser puestas en la parte más baja.
Si se tuviera que hacer el lavado de vajillas delicadas, es muy recomendable que primero se lleve a cabo una prueba con una sola pieza. De esta manera, si se produjera algún desperfecto, evitaremos que afecte al resto.
Si lo que se quiere es evitar tener que reparar el lavaplatos en Madrid, Barcelona o cualquier otra ciudad, es realmente necesario que antes de cada lavado se retire todos los restos de comida y aclarar bien platos y vasos. Así, se prevendrá atascos y que la suciedad quede reseca.
En último lugar, hay que procurar llevar a cabo una periódica limpieza y un buen mantenimiento del lavavajillas. Entre las partes más importantes se encontrarán los filtros o la resistencia. Para ello, es conveniente utilizar los productos adecuados.